Escalada en hielo Torrent de Font Roja. Campelles. (Ripollès).

Aprovechando los días rigurosos de frío, Frank y yo decidimos hacer una matinal para luego llegar pronto a casa. Por cercanía, variedad en cascadas y el frío que hace, el sector Pedraforca imaginamos que debe estar a petar de gente y decidimos probar suerte en esas cascadas, solitarias, de las que muchas veces no prestamos atención.
Campelles es el lugar elegido. Temprano por la mañana, nos plantamos en el lugar.

Este es el comienzo de la cascada, en la que se compone de dos reuniones, unos 80 metros en total, 75º/85º de inclinación y una graduación de I/3. Utilizaremos de tres a cinco tornillos de hielo.

Y estas son las vistas desde la base de la cascada en dirección a Campelles y Ribes de Freser.

Comenzamos con el primer largo.

A medida que se clavan los piolets, podemos comprobar el estado del hielo. Se rompe en pedazos, lo cual, nos tenemos que asegurar una, dos y tres veces que el piolet clave bien a medida que vamos avanzando y así asegurar el ascenso.




Llegados a la R1, basada en bagas montadas en los árboles, no tardamos en darle al segundo y definitivo resalte...
Después de esto, rapel desde los árboles y para casa.

Escalada en hielo en la Vall de Boí. Vía Conrad el bàrbar II/3

Último día. Siguen las bajas temperaturas y fuertes rachas de viento.
Nos quedamos cerca de Barruera. Nos llama la atención las dos cascadas que quedan en la parte este de Barruera, concretamente en la Roca de l'Espà. Son las vías llamadas Conrad el Bàrbar y Metalnoia.
Nos decantamos por la de Conrad el Bàrbar con un desnivel de 200 m., una dificultad de II/3 y una aproximación de 15 minutos desde donde dejamos el coche.
Después de sortear el pedregal del barranco, nos situamos al pie de la vía.


El primer largo, le tira Farnk. El hielo está bastante compacto, pero no deja de haber zonas donde el hielo es un poco precario.







Para nuestra sorpresa, la vía está equipada con reuniones en cada largo. Monta Frank la R1 y subo de segundo y posteriormente Albert.

Comienza el segundo resalte. Aquí subo de primero. Bordeamos la pequeña poza helada por la banda izquierda y comienzo a subir...

Una vez alcanzada la R2, monto reunión y sube Albert y luego Frank.
Estamos los tres en R2 y nos encontramos con un pequeño problema. Al caer algo de agua por la cascada y mojar las cuerdas, estas se nos hielan. Es difícil manipularlas, están totalmente tiesas, parecen alambres!!!!!
Por lo que la ascensión se refiere nos queda algo más de la mitad. Finas lineas de hielo hasta encontrar otro largo con abundante hielo hasta llegar al final, pero nos es imposible continuar con estas cuerdas y los guantes helados, el frío comienza a pasar factura.
Decidimos descender y regresar al punto de partida, no sin estar exentos de nuestra dificultad a la hora de hacer correr las cuerdas por nuestros descendedores.


Una vez en los coches, que mejor que una buena cervecita y calentarnos con el poco calor que ofrece hoy el astro sol.

Escalada en hielo. Vall de Boí. Vía Peta-Zeta. Contrafort del Tuc des Costes. Sector Barranc Nere.

Hoy hace bastante frío. El frente "siberiano" anunciado ha llegado. -9ºc y además acompañado por fuertes vientos. Decidimos probar suerte en una cascada orientada al sol, aunque este poco calienta, pero es mejor que estar en la sombra...

Para variar de zona, nos dirigimos a la cascada con el nombre de vía Peta-Zeta, en el contrafuerte del Tuc des Costes.

Otro día de errores. Después de 1:30 h. de hacernos camino entre el frondoso bosque, la gran desilusión. Una gran cantidad de agua se desliza por el poco compacto hielo formado. No nos arriesgamos y después de una aproximación de lo más engorrosa, regresamos al punto de partida.

Ya que estamos cerca de la planta embotelladora de agua del la Vall de Boí, decidimos pasar la tarde en los pequeños resaltes de pie de carretera, esos que los ves de pasada y que apenas haces caso o los dejas para otro día. Aquí matamos el gusanillo...

Escalada en hielo en la Vall de Boí. Sector Cantera

Debido a las altas temperaturas de semanas posteriores y un invierno algo cálido, muchas de las cascadas y sobretodo de placa no se hallan formadas, el agua del embalse de Cavallers no tiene ninguna capa de hielo y decidimos buscar cascadas formadas por la continuada caída del agua.


Llegamos a la base de la Islandis. Parece que se pueda subir, pero a la que lo intentamos, el hielo comienza a partir a medida que clavamos nuestros piolets. El primer resalte aún se podría hacer algo, pero luego ya, dudamos de la consistencia del hielo en plena cascada vertical y decidimos dar marcha atrás.

Decidimos buscar el rincón de la Cantera. Lugar donde cabe un tanto por ciento elevado de que podamos hacer alguna cosa. Llegamos casi a mediodía y decidimos comer algo.

Llega la tarde y le pegamos a la vía Míting de 30 m y fácil ascensión.

Mientras Frank me asegura, subo primero...

Luego sube Albert...

Y luego Frank.

A nuestra izquierda hay dos escaladores realizando la vía Amigos de lo Ajeno. La realizan de segundo los dos, habiéndola montado en top rope. El romper del hielo con sus piolets es constante, lo cual, decidimos bajar a la cascada del Salto del Mandril. Ya una clásica en nuestras aventuras por la zona y acabar nuestra primera jornada de escalada y sin mucho éxito.